Sobre vejez, flexibilidad y el portazo

Sobre vejez, flexibilidad y el portazo

Las personas tendemos a resistirnos a los cambios. Reconozco que no fue fácil asumirme como una mujer mayor. En un principio, cuando empecé a descubrir las huellas del paso del tiempo en mi cuerpo, me reía. La primera cana me robó una sonrisa con algo de nostalgia, un ja ja ja discreto y la tolerancia cómplice al típico comentario: “mami, ¡ya tenés canas!”. Hubo un tiempo en que me pasaba largos minutos frente al espejo estirando mis ojeras. En el mismo ritual trataba de convencerme de que la arruga junto a la comisura del labio era “de expresión”.

Hackeo, viejismo y orgullo mayor

Hackeo, viejismo y orgullo mayor

Quienes nos dedicamos al mundo de la vejez y de las vejeces ya estamos comenzando a pensar qué hacer, cómo aportar o contribuir a conmemorar el 1 de octubre, Día Internacional de las Personas Mayores (ONU). Seguramente a lo largo y ancho del país, organizaciones y personas promoverán diferentes actividades. Desde el Club de la Porota vamos a trabajar con la idea #hackeaelviejismo así como apoyar la propuesta impulsada por el Instituto Iberoamericano de Ciencias del Envejecimiento (InICiEn) y su fundadora la Doctora Graciela Zarebski, en declarar el 1° de octubre como Día del Orgullo Mayor.